Una plaza muy coqueta, aunque no sea una plaza espectacular ni grande, pero describe belleza en su construcción.
Es la típica plaza gallega, con casas en granito, soportales para resguardarse de la lluvia, galerías de madera en las fachadas de las casas y, cuenta además con un cruceiro que adorna su parte central.
Como podéis observar hasta en invierno son un reclamo más que suficiente para que el andante se siente, en las terrazas de los distintos bares de la plaza, a degustar unas tapas en esta pequeña ciudad gallega.